Avivamiento.

Hoy en día hay ministerios, como ministros, denominaciones, jóvenes, que hablan de un avivamiento, diciendo: que este es el tiempo de nosotros, estamos en tiempo de avivamiento… y hace tiempo atrás también se decía lo mismo.

Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. (Ezequiel 37:3-4)

El avivamiento que muchos predican y hablan, que se viene un nuevo tiempo, una nueva era y todo ese asunto, comienza en cada creyente que tiene una convicción clara, que tiene una visión clara, el avivamiento comienza en la fe de cada uno, si el hombre o la mujer que le sirve a Dios que no tiene fe o no tiene la fe suficiente no hay avivamiento, el avivamiento se produce por la fe y la fe por el oír palabra del Señor, una persona que lee, que ora y no tiene avivamiento no está recibiendo esa unción que está en nosotros que no se hace efectiva porque está llevando una vida de religiosidad, no está viviendo esa vida que el Señor quiere.
El avivamiento debe ser constante, no de tiempo en tiempo o etapa en etapa porque el avivamiento es vida y vida es nuestro Señor Jesucristo.

Nosotros declinamos este avivamiento de accionar esa fe en nosotros, porque comenzamos a ver nuestras realidades, dificultades, los defectos de los demás, empezamos a ver todas las cosas negativas y la fe sin darnos cuenta se va apagando porque estamos creyendo cada vez más en lo que es visible y no invisible que es el Dios todo poderoso.

Estamos confiando en nuestras capacidades  pero no confió en esta persona, estay bien o no bajo este anhelo, esta visión porque no estoy confiando en el que vivifico mi vida cuando estábamos muertos en delitos y pecados, él nos rescató para darnos una nueva vida.

En el momento en cual el Señor nos tomó a cada uno de nosotros provoco en nosotros una nueva vida y la nueva vida en nosotros produjo un avivamiento a través de la fe en nuestro Señor Jesucristo, entonces la iglesia necesita dar vuelta la tierra de vez en cuando ; cuando el Señor viene a procesarnos, tratarnos de una manera fuerte, dura, en la disciplina para que la tierra sea emblandecida , para que se quebraje , porque mucho tiempo pasa donde no se siembra, muchas congregaciones pasa mucho tiempo en donde la tierra es solamente tierra y no a servido para dar frutos.

El avivamiento comienza de una manera personal, en uno mismo y comienza cuando nos arrepentimos, antes estábamos muertos después que el Señor nos recogió pasamos hacer vivos en el espíritu, tenemos una nueva vida y en abundancia, pero muchos de nosotros estamos en el evangelio, actuamos conforme nuestra vista, oído, visión, nuestra carne y no hay avivamiento y nos tomamos de muletillas.

La oración es el alimento de cada uno de nosotros, el leer la palabra es el alimento, la que nos nutre pero muchas veces tomamos esas cosas que alimento espiritual las tomamos como muletas, bastones y nos afirmamos en eso, mas no tenemos una comunión primeramente con Dios, real y pura,

Visión clara, confirmación segura y no tenemos comunión con los hermanos, entonces el avivamiento para que sea real en las congregaciones tiene que existir una unanimidad, armonía, comunión, tiene que haber transparencia, tiene que verse la luz de nuestro Señor Jesucristo en medio de la congregación, tiene que existir esa luz que alumbre si no existe eso no va haber avivamiento; porque el avivamiento comienza de forma personal, en nuestras acciones, en nuestro actuar, en nuestro testimonio.

El Señor nos va usar de forma personal para que seamos vivificados en él y para eso hay que tener fe y convicción si no tenemos la fuerza y la seguridad para creer que eso será así es porque todavía no hay un avivamiento interior en nosotros porque hay personas que caminando con el Señor y aun viendo milagros dudan que el Señor va ser un milagro o no lo va hacer, existe una duda, siempre hay una cosa que separa lo divino con lo terrenal, lo separa, nosotros con nuestros pensamientos humanos separamos nuestra vida espiritual , pero si nos dejamos guiar por la voluntad de Dios o nos dejamos guiar por nuestra fe en él podemos prosperar, crecer y puedo ver milagros. , Entonces el avivamiento no consiste en una acción bonita, ni en una canción de adoración, que estemos por las nubes, no, consiste en que tengamos una relación personal con el Señor.

El Señor nos toma a nosotros para hacer vivir esos huesos secos que es la sociedad, humanidad, esos que están tendidos en el camino, el Señor nos puede hablar a nosotros de avivamiento interiormente porque él ya nos avivó a nosotros, nos puso una nueva visión, para que nosotros alumbremos a este mundo y seamos la sal de la tierra, somos lumbreras, el Señor nos trajo para seamos los que vamos a profetizarle a esos huesos secos para que ellos tengan vida también.

Se imagina que el profeta se hubiese quedado en el valle de los huesos y hubiese estado todo el tiempo profetizando: dice el Señor que vivanes lo mismo de estar todo el tiempo en la iglesia dándonos ánimo a nosotros mismos, no podemos estar todo el tiempo diciendo: ánimo hermana o hermanono podemos estar así.

El evangelio no es profecía, ayuno, oración, el evangelio es poder y potencia, y cuando creemos eso hay está actuando en nosotros el avivamiento.
La persona que tiene avivamiento puede que tenga problemas, dificultad, enfermedad pero siempre va a tener un aleluya, siempre va a levantar sus manos para adorar, aunque este llorando pero está adorando, exaltando el nombre del Señor, esa persona tiene avivamiento.

Entonces sabiendo esto podemos darnos cuenta que el avivamiento comienza de forma personal en cada creyente, cuando nos disponemos en nuestra mente, corazón y nuestro tiempo, provocar algo en el lugar donde el Señor nos a colocado, no el activismo pero si ser un productor, producir algo que no sea algo monótono, que no sea algo rutinario porque cuando hay avivamiento todos los días son diferentes.
No puedo estar el día de mañana diciendo lo mismo o viviendo lo mismo tenemos que proclamar en nosotros mismos que haya un avivamiento en nuestras actitudes.

Cuando escuchamos chismes o cuando creemos que sabemos más que las otras personas nuestro avivamiento se apaga porque florece toda la parte humana y carnal. Nuestro avivamiento comienza con nuestro tiempo, actitudes, con nuestra fe debemos de publicar que hay algo especial en nosotros, que es de Dios, tenemos que transmitir que nuestra fe va a ser transmitida a través de nuestro avivamiento, va a ver un accionar, vamos a tener tiempo para predicar, vamos a ser sometidos, vamos a tener algo especial por nuestra fe.

Estamos llamados con un propósito de avivar a este mundo, en la pureza y la limpieza, es avivarlo para que despierten que ellos están en tinieblas y nosotros estamos en la luz, y que vengan a la luz que es nuestro Señor Jesucristo, mientras la iglesia no entienda que el avivamiento comienza con el buen testimonio, con el sometimiento, con hacer lo que el Señor nos manda y no hacer lo que nosotros queremos hacer.


El un avivamiento no es emoción.


Congregación cristiana restauración de fe elohim.
Con la tecnología de Blogger.