Guerra espiritual. Prt II.

Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. (Efesios 6:13)

Nadie sabe cuando será ese día malo algunos dicen que es cuando estamos en una prueba pero nadie sabe cuando viene la prueba sino que aquí la palabra nos habla de apercibirnos antes que venga la prueba o suceso porque no sabemos cuando viene. A veces el Señor nos avisa antes de tiempo y es como una inquietud, uno dice que es como un presentimiento pero no es así sino que es el Espíritu santo que nos hace sentir que algo va a pasar, es como una sensación y uno no sabe, no conoce esa dirección porque pedir, porque orar todo tiempo hay que encomendarse al resguardo del Señor, si todos supiéramos que nos va a pasar seriamos más felices, estaríamos más entregados al Señor, no habría cansancio, hambre, no habría ninguna cosa pero como no sabemos lo que viene vivimos de una forma indiferente pero el Señor nos dice que la lucha es constante que debemos apercibirnos antes que llegue el día malo.

Cuando venga la prueba no debemos tener temor o vergüenza en que vamos a estar solos sino recordemos que eso va a pasar y volvemos a seguir nuevamente con la ayuda del Señor.

Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios (efesios 6:14-17)

Los lomos son la parte de la espalda de la altura de los riñones eso son los lomos, ceñir es abrazar, rodear es como ponerse una faja, personalmente debemos andar en la verdad, nuestra vida debe ser una verdad sea buena o mala pero andar en la verdad, reconocer cuando nos equivocamos no decir que nunca nos equivocamos porque eso es mentira no es una verdad.

Ser justos en todo porque esa justicia también será favorable para nosotros a su tiempo.

Apresto es preparación, nosotros sucumbimos a las debilidades, pruebas porque no estamos aprestos, no estamos preparados, es prevención debemos estar aprestos, por eso es bueno escuchar, estudiar, leer, porque debemos estar aprestos, prevenidos con la palabra acordémonos que el Señor estuvo 40 días ayunando y orando pero no reprendía al diablo con la oración y el ayuno lo reprendió con la palabra si hubiese sido con el ayuno o la oración el diablo no se hubiese acercado pero se acercó igual por eso lo reprendió con la palabra.

El escudo de la fe es un arma defensiva con que se cubre el cuerpo o parte de el y se lleva en el brazo izquierdo. Sobre todo no perdamos la fe en la prueba o dificultad.

A veces es tan complicada nuestra humanidad que vemos que las cosas que están sucediendo no tienen solución, que los problemas o conflictos matrimoniales son muy fuertes que hasta se piensa en separación pero si somos creyentes ¿nuestra fe dónde está?, ¿Dónde está tu fe?, ¿Dónde pusiste tu fe? Hay que tomar la fe y no soltarla porque aunque todos vean que tú no vas hacia adelante tu fe en el Señor te da la victoria.

Yelmo su definición es pieza de la armadura antigua que cubría toda la cabeza y el rostro, en nuestra mente debe estar claro lo que es la salvación, algunos dicen que lo llevan en el corazón pero a veces nuestro corazón esta tan indiferente y no hay conocimiento, tenemos que conocer la palabra, antes de guardarla debemos conocerla, saber de lo que se nos está hablando, saber lo que estamos leyendo, la espada del espíritu que es la palabra de Dios, tenemos que orar, ayunar, algunos lo hacen y otros no pero lo que nos da la victoria es tener la palabra. Algunos dirán como sale en la palabra: que ese espíritu no sale con oración y ayuno… pero si no tenemos palabra como podemos orar, como vamos a reprender.

Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos (Efesios 6:18)

No creamos que gritando aleluya, con gritos de júbilo o diciendo gloria a Dios vamos a vencer al enemigo sino que es necesario el escudo, yelmo y toda la armadura, es una cadena.

Estas cosas vienen de generación en generación, cada uno de nosotros siendo hijos del Señor no sabemos si nuestras generaciones pasadas o quizás mas de alguno tubo algún familiar que hizo pacto con el diablo y por eso hoy no podemos prosperar, no sabemos eso es por eso que tenemos que buscar a nuestro Señor Jesucristo para poder derribar toda artimaña del enemigo y que todo espíritu maligno sea echado y reprendido en este tiempo por nosotros para que no pase a nuestra descendencia, a veces hay espíritu de pobreza que vienen arrastrándose desde otras generaciones hacemos todo lo que podemos pero no podemos derribarlo pero hay gracias al Señor tenemos la potestad para derribar todo espíritu maligno.

No crea usted que porque se convirtió la lucha va a terminar porque la lucha es constante, su miseria, su pobreza no es voluntad de Dios, debemos romper esas cadenas en el nombre del Señor.

Congregación cristiana de restauración de fe Elohim.