Despierta.


Cuando decimos que ponemos oído a la palabra debe producir algo interiormente, no hay estrategia, ningún consejo humano que pueda transformar o convencer a alguien si no es Dios a través del Espíritu santo, da un poco de pena y a veces no dan ganas de seguir por cómo se está comportando la iglesia a nivel general, antes lo que sucedía a veces era muy extremo y ahora lo extremo se fue y está todo muy liberal, hay personas que trabajan en la televisión compartiendo el mensaje del Señor a la vista de todos comportándose y vistiéndose igual que el mundo pero no se dan cuenta los líderes que no están mostrándose como personas sino que están mostrando a la iglesia y se ha llevado esto a las distintas denominaciones antiguas, tradicionales que también están cayendo en lo mismo y más aún argumentan diciendo: este es el evangelio de ahora… pero si leemos la palabra el evangelio siempre ha sido el mismo, la palabra es lo principal, el plan de salvación es la base para poder nosotros creer que vamos a estar con el Señor pero el mostrar la iglesia no es solamente de palabras porque hay personas que usted las mira y no parecen creyentes pero tienen palabra, conocimiento pero les falta convencimiento.

Cuantos hijos de hermanos, hermanas, pastores no están en la iglesia sino en otros lugares y algunos dicen: yo me pelo las rodillas orando… pero los hijos están haciendo lo que quieren, esto es familiar, primero entramos el mundo a nuestros hogares ahí comienza el diablo a trabajar y después ese mundo la familia lo trae a la iglesia y comenzamos a contaminar el mundo espiritual que nosotros debemos llevar como hijos del Señor, está muy tomado  livianamente decir que somos cristianos y se ha ofendido a Dios con tal frase porque el cristiano es el que se aparta para Él, el cristiano no se refiere a andar religiosamente sino el que esta para servir y la iglesia de hoy dice: soy cristiana, yo soy cristiano… pero no tiene un llamado a servicio, la iglesia está viviendo de activismo, eventos y esto lleva años y ha crecido tanto que se levantan ministerios con una doctrina totalmente liberal y critican por ejemplo a los que predican la doctrina de la prosperidad sin darse cuenta que es solo una doctrina porque la verdadera iglesia que el Señor formo aquí en la tierra es una iglesia totalmente diferente a lo que se ve, totalmente diferente, a los jóvenes los mantienen en la iglesia con entretenciones no los tienes convencidos de que tienen que servir a Dios porque Dios es soberano, los jóvenes van conociendo la palabra, pueden tener algún tipo de conocimiento pero debemos tener cuidado y saber bien si son parte de la iglesia verdadera porque servir al Señor es difícil.

Es difícil que un joven tenga conocimiento y salga a ministrar porque ni nuestro Señor Jesucristo siendo hijo de Dios tuvo que esperar tiempo, tuvo que pasar procesos.

En los jóvenes que hoy se pueden ver en algunas iglesias no hay en ellos un rostro de motivación que diga: yo quiero aprender porque el Señor me va usar… no hay nada y a los líderes en las iglesias no les queda otra opción que mantener a los jóvenes entretenidos, la iglesia del Señor está dormida.

La primera responsabilidad de la iglesia parte en la familia en la casa es decir los padres deben motivar a los hijos a creer en el Señor no por lo que se haga en la iglesia sino porque es Dios, amar a Dios porque es Dios, servir al Señor y congregarse porque hay que alabarle porque el asistir a una iglesia es ir a entregar nuestro culto porque si asistimos pensando o diciendo una expectativa de lo que pueda producir el culto es porque no asistimos con el corazón dispuesto en la adoración, entonces los niños, los jóvenes que van creciendo deben ser motivados a la iglesia que está en el hogar familia y esa iglesia está dormida porque la iglesia de hoy solo es celular, internet, juego, entretención porque los padres no son responsables de guiar a los hijos, no solamente en que aprendan la parte secular, en los estudios, intelectualmente, sino enseñarles lo que es la vida espiritual que sirvan para algo.
Es decir que comenzamos a despertar en nuestro hogar, la iglesia está dormida porque la iglesia familiar está dormida, Dios quiere que despertemos, las cosas no se mueven si nuestra familia no se mueve, si nosotros no movemos a nuestra familia.
Cuando el Señor hace un verdadero llamado despierta los corazones pero como padres tenemos la responsabilidad de instruir a nuestros hijos.

La labor nuestra como familia, la iglesia familiar es la que trae la familia a la iglesia y la iglesia es viva, muchos antes de asistir a un culto están escuchando música secular, viendo televisión y no asistimos a nuestra congregación limpios sino contaminados.
Debemos entender que la iglesia familiar está dormida y después la iglesia congregacional porque algunos al asistir al culto dicen: el culto aburrido… pero si iglesia familiar esta igual o peor.

Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo. (Efesios 5:14)

Es decir que una persona cuando está durmiendo es igual que si estuviera muerto, tiene oído y no oye, tiene ojos y no ve, es decir que una persona que está durmiendo parece que está muerto.

Cuando como iglesia estamos durmiendo es similar a una actitud de muerto porque teniendo vida no la aprovechamos espiritualmente, teniendo nuestro cuerpo sano o con vida no se mueve, esto nos lleva a estar en un grado de sueño profundo que no nos despierta nadie.
Y como iglesia familiar si estamos dormidos nos dice el Señor, levántate de los muertos… más aún tenemos enfermedad, estamos pasando escases, no nos alcanza el dinero, tenemos problemas y nos dice: levántate de los muertos… debemos analizar nuestra familia y analizarnos nosotros mismos ya que la iglesia parte de nuestro hogar es decir si no estamos llevando nuestra familia al Señor nuestra congregación duerme porque nuestra iglesia familiar está durmiendo y la iglesia familiar cuando está durmiendo comienza a ver lo secular, comienza mirar lo que otros hacen y la iglesia familiar es la que hace la iglesia congregacional, todos formamos la congragación pero así no estamos trabajando sino durmiendo y estamos como muertos en nuestros hogares.

El Señor hace una comparación de que el que duerme es igual a un muerto porque no tiene movimiento, esta inerte.

Todos tenesmos problemas, todos tenemos unos más que otros pero tenemos que creer cuando el Señor nos dice que no pone más cargas de la que podemos llevar y cuando habla de carga es porque todos llevamos un peso familiar pero el Señor no pone más peso pero como estamos durmiendo no nos damos cuenta que las respuestas y salida a nuestras dificultades están más cerca de lo que pensamos porque los que están durmiendo no se dan cuenta porque es tan profundo el sueño que nos hace ver como muertos, falta que el Señor venga y nos despierte a bastonazos, Y te alumbrará Cristo… es por eso que a veces no sabemos qué hacer, no sabemos a dónde ir porque el Señor nos está diciendo: DESPIERTA… estas confundido, no sabes que hacer… despiértate, estas como muerto… y si tú te levantas yo te voy a indicar el camino…

Hoy vemos los problemas económicos como gigantes porque estamos durmiendo, cuando alguien nos despierta nos levantamos sobresaltados, con miedo, asustados pero lo que nos despierta son la enfermedades, problemas y andamos asustados porque cuando caemos en un sueño profundo nos cuesta despertar, no podemos pelear aquí en la tierra por nuestra salud o por lo cotidiano si no está el Señor de nuestro lado.

El Señor nos dice: levántate de los muertos…  yo te voy alumbrar, yo te voy a indicar… yo voy hacer contigo… y ese despertar se va a ver cuándo en los cultos estemos con otra actitud, cuando nuestro hijos estén conectados con lo que es la vida espiritual porque el culto parte de la iglesia familia pero lamentablemente la iglesia familiar está mal pero el Señor quiere que despierte.

Debemos despertar, el evangelio y el servir al Señor es de uno es decir que si estamos despiertos, va estar despierta nuestra esposa, los hijos pero muchos de nosotros solo demostramos cansancio, sueño, respiramos más olor a carne que espíritu, no desgatemos nuestra vida, nuestro tiempo en lo que es la tierra porque va a llegar el momento en que vamos a partir de este mundo y de nada van a servir los logros terrenales, a veces dejamos casa, dejamos los hijos, a veces dejamos tiempo de servir al Señor sabiendo más que nada que no sabemos el momento en que Dios viene por nuestra vida y es por eso que hay que estar despierto.

Las malas decisiones las tomamos porque estamos durmiendo, cometemos errores por estar durmiendo.

Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. (Romanos 13:11)

Ha pasado tiempo ya caminando junto al Señor y llega un momento que es provocado por estar durmiendo, comenzamos a pensar mal por un cansancio espiritual, muchos lo hemos pensado, llega un momento de cansancio espiritual, cansancio de ir a la iglesia a congregarse, esos pensamientos los tienen los que duermen, para los hijos del Señor cuando estamos vivos y despiertos todo lo podemos en cristo que nos fortalece aunque tengamos dolor, aunque tengamos problemas, debemos darnos cuenta de esta fragilidad humana que tenemos que en nuestro sueño profundo estamos tomando muy malas decisiones y estas malas decisiones están trayendo malas consecuencias.

Solamente los que están despiertos o despiertas pueden ver el camino que deben seguir, levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo… pero si no nos levantamos, si no nos despertamos vamos a seguir cometiendo error, tras error.

La forma para que podamos despertar es orar primero, dediquemos tiempo al Señor, busquemos la forma de trabajar en lo espiritual, nadie se va acercar a una persona que está durmiendo porque como estamos durmiendo no hay vida, debemos ser constantes aunque nos valla mal, aunque las cosas no mejoren debemos de ser constantes, con esa constancia y con fe vamos a sentir en nuestro espíritu, en nuestro ser que algo está viviendo, hay que perseverar, buscar pero parte en nuestra casa primero, no miremos mucho lo que hace el mundo, la iglesia que está viva, que esta despierta camina diferente.


Primero pensemos en el bienestar de nuestra iglesia familia porque eso nos va llevar a la iglesia, debemos proclamar que la iglesia familiar se levante de los muertos, debemos anhelar sentir ese deseo de estar en la casa leer, cantar y ver los que es llevar la parte espiritual pero hoy el mundo tanto nos absorbido que perdemos el tiempo.


Congregación cristiana de restauración de fe Elohim.

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