¿144 mil sellados?.
Hay muchos
que dicen que en el nuevo pacto están solamente considerados los 144 mil
sellados.
Y el Dios de
paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de
las ovejas, por la sangre del pacto eterno (Hebreos 13:20) cuando habla de la sangre del pacto eterno
podemos entender que el nuevo pacto siempre estuvo
en el corazón de Dios, está haciendo mención del pacto eterno que
estaba antes de hacerse efectivo, está hablando de pasado, presente y futuro es
decir siempre ha estado, siempre estuvo en el corazón de Dios, el plan de
salvación, todo lo que está en el antiguo testamento, en el pacto antiguo son
simbología de lo que iba a venir.
El pueblo de
Israel no pudo cumplir la ley, no pudo cumplir el pacto antiguo, nunca lo pudo cumplir
es por eso que ese pacto no era efectivo, no había un compromiso de obedecer a
Dios en el pacto que había hecho Jehová Dios con ellos, Jehová Dios nunca les
fallo, nunca les falto pero el pueblo si fallo, como fallamos hoy nosotros, Él
sigue cumpliendo los pactos el antiguo y el nuevo, ahora podemos pensar si
Jehová Dios en el nuevo pacto lo hace con el pueblo de Israel nuevamente y
coloca a la iglesia injertada ahí, ¿el pueblo de Israel cumple o cumplimos en
el nuevo pacto? La verdad es que no cumplimos, somos faltos, a veces predicamos
bonito, cantamos bonito, hacemos cosas para el Señor porque queremos agradarle
pero estamos siempre fallándole, entonces cuando se hace efectivo el nuevo
pacto, cuando esta ya concretado pero cuando se pensó el nuevo pacto o Dios lo
pensó, lo hizo solamente pensando en su hijo
es por eso que dice la palabra que Él vino a cumplir la ley no abogar la ley
porque nosotros éramos incapaces como el pueblo de Israel también era incapaz, la
diferencia que el antiguo pacto habían 10 mandamientos, nuestro Señor
Jesucristo en una parte los fusiono e hizo, amaras
a Dios con todo tu corazón… pero los encerró todos los demás es la
diferencia pero hoy no podemos matar, no podemos robar, no podemos mirar a la
mujer de nuestro prójimo, no podemos codiciar, todo está incluido en ¨amaras a
Dios con todo tu corazón¨ porque cuando estamos amando a Dios estamos
entendiendo que todo lo que está en ese amar a Dios están todas las cosas que
no podemos hacer o no debemos hacer.
La iglesia
no será capaz de librarse de todas esas cosas, tentaciones y todo eso, es por
eso que Jehová Dios hace el pacto con su hijo y el hijo es el mediador, mediador
quiere decir que intercede, para los creyentes el nuevo pacto está en la
persona de nuestro Señor Jesucristo que es el mediador para nosotros.
Hoy en día
tenemos al mediador que es nuestro Señor Jesucristo donde nace para nosotros,
donde se firma con su sangre el pacto, el nuevo pacto,
en la antigüedad antes que hubiera el nuevo pacto todo aquel que no era judío y
quería ser parte del pueblo de Israel tenía que realizar un acto llamado la
circuncisión para pertenecer y ser llamado del pueblo, había sangre en ese acto
y pasaba a ser parte del pueblo, ya no era mirado como extranjero sino que era
mirado como parte del pueblo, más adelante cuando se hace presente que viene la
venida del Señor a la tierra y tenía que ser con derramamiento de sangre, la
sangre libro al pueblo de Israel en Egipto de la muerte, esos son detalles que
se van uniendo y el pueblo de Israel fue librado cuando marcaron las puertas
con sangre y paso la muerte, cuando los vamos al nuevo pacto que es un
regalo, una garantía para todo aquel que cree y agrega: no se pierda más tenga vida eterna… es
decir con la sangre del Señor reconocemos que tenemos vida eterna y perdón de
pecados, estamos marcados aunque nos caigamos, nos paremos, no podamos, estamos
marcados porque es la sangre que nos marcó, entonces cuando viene la muerte por
nosotros y estamos en una condición mala con Dios, en una relación mala con
Dios ¿Qué nos va a librar de la muerte eterna? La sangre y el Señor va extender
su mano y antes que nos perdamos nos va a recoger y nos va retirar porque ya
estamos marcados, va a ver un momento en todo ser humano de reflexión y de
reconciliación con Dios y Dios lo va a escuchar porque es su hija o hijo, hay
mucha gente que cuando está muriendo dice: Señor
aquí estoy…
En aquel día
hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra,
desde el río de Egipto hasta el río grande, el río Eufrates (Génesis 15:18) este pacto no tiene nada que ver con el
antiguo o nuevo pacto sino que lo hizo con Abram, esa ceremonia también fue con
sangre es decir que siempre estuvo presente la sangre.
Nosotros dentro del nuevo pacto no tenemos un
sacrificio con sangre y eso nos reafirma que Jehová Dios hizo el pacto con su
hijo no con la iglesia, no con el pueblo de Israel porque nosotros no
derramamos sangre.
Porque esto
es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos
los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad. Porque hay un
solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el
cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su
debido tiempo.
(1 Timoteo
2:3-6)
Aquí podemos
darnos cuenta de los que afirman que en el nuevo pacto solo serán los 144
salvados están equivocados.
En aquel día
hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra, desde
el río de Egipto hasta el río grande, el río Eufrates (Génesis 15:18)
No tiene
nada que ver con el pacto general es un pacto de descendencia y personal,
particular, ¿Dios ha hecho un pacto con nosotros?, ¿Dios nunca nos dijo: voy hacer esto contigo…? Dios ha hecho pacto con
nosotros y nos ha dicho muchas cosas, en el pacto hay un propósito, Él
nos ofreció mucho pero nosotros también debemos hacer, no por la salvación sino
por cumplir el pacto, laso.
Cuando
tenemos una relación con Dios, en la intimidad con Dios sabemos que es lo que
Dios quiere con uno porque vamos sintiendo algo interiormente, Dios hace un
pacto con nosotros y nos habla y nos va repitiendo con el tiempo lo mismo y
cuando pasan muchos años nos dice: con
amor eterno te he amado… yo hice un
pacto contigo… con todos sus hijos Dios ha hecho pactos.
Dios es un
Dios de pactos no es un Dios generalizado, Él quiere que todos los hombres se
arrepientan eso es para todos pero los pactos son para los que quieren
servir, ¿será que queremos servir? Porque hay se cumple un pacto o sino no
hay pacto porque Abram tenía una promesa de Dios que iba a prosperar porque le
creyó a Dios.
Decidme, los
que queréis estar bajo la ley: ¿no habéis oído la ley? Porque está escrito que
Abraham tuvo dos hijos; uno de la esclava, el otro de la libre. Pero el de la
esclava nació según la carne; mas el de la libre, por la promesa. Lo cual es
una alegoría, pues estas mujeres son los dos pactos; el uno proviene del monte
Sinaí, el cual da hijos para esclavitud; éste es Agar. Porque Agar es el monte
Sinaí en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual, pues ésta, junto con sus
hijos, está en esclavitud. Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de
todos nosotros, es libre. Porque está escrito: Regocíjate, oh estéril, tú
que no das a luz; Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes dolores de
parto; Porque más son los hijos de la desolada, que de la que tiene marido. Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos
hijos de la promesa. Pero como entonces el que había nacido según la carne perseguía
al que había nacido según el Espíritu, así
también ahora. Mas ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo,
porque no heredará el hijo de la esclava con el hijo de la libre. De manera, hermanos, que no somos hijos de la
esclava, sino de la libre. (Gálatas 4:21-31)
Aquí podemos
ver que son más de 144 mil rescatados así que esa teoría o doctrina es falsa
según la biblia, Dios conoce cuantos son salvados porque hay hijos de perdición
y salvación.
Los que estamos bajo el nuevo pacto somos
mucho más que 144 mil rescatados.
Según un
estudio estos 144 mil fueron los Israelitas que creyeron en un principio porque
no todos creyeron, según el estudio de todo el pueblo Israelita creyeron 144
mil, los 144 mil sellados eso es para el pueblo de Israel porque creyeron a
pesar de toda la multitud, en la antigüedad vivían peleando habían profetas y
el pueblo era desobediente no querían creer.
El nuevo pacto parte con el sacrificio de nuestro Señor Jesucristo
pero es eterno, estaba antes del primero puede
ser algo contradictorio pero todo va unido, Dios en el fondo a lo mejor quiso
evitar el sufrimiento del hijo sabiendo que iba a llegar al nuevo pacto y lo hizo
con animalitos, cuando Adán y Eva pecaron Dios los vistió con pieles de
animales es decir que desde el principio Dios quiso estar con el hombre,
desde el principio cubrió al hombre, lo vistió pero para poder en ese tiempo
vestirlo había sacrificio y no era un sacrificio humano sino de animales, el
hombre pagaba un precio por la desobediencia, estaba desnudo pero aun así en su
desnudez Dios seguía siendo Dios y hoy es lo mismo, como creyentes somos
desobedientes, bien testarudos y Dios nos sigue vistiendo, nos sigue dando de
comer, nos sigue dando trabajo solo por el sacrificio de su hijo, no es por
nuestras fuerzas o capacidad es todo por Él, por su gracia.
Debemos
entender que no estamos ajenos al antiguo pacto sino que estamos dentro del
antiguo pacto porque dentro de la ley, ordenanzas y sacramentos que habían en
la antigüedad se refería a toda cosecha, ganado porque en ese tiempo no habían
industrias, no había nada y todos iban cumpliendo con eso, cuando se habla de
los diezmos no se habla que diezmaban dinero solamente sino que animales, de
todo lo que tenían, no era la cantidad sino lo mejor y una de las cosas que
debemos de aplicar es como sembrar, cuando uno va ofrendar uno tiene que pensar
en las otras personas que estamos beneficiando o bendiciendo porque queremos
que coman bien porque así como a medida que nosotros damos vamos a recibir, no
de lo que nos sobre sino de lo mejor en eso debemos de tener cuidado con
respecto a los sacramentos, a lo que uno hace para Dios.
Y oí el
número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las
tribus de los hijos de Israel. (Apocalipsis 7:4)
No fueron
elegidos sino que ellos creyeron, no fueron elegidos dice sellados porque
creyeron, los que hemos creído en el Señor también
hemos sido sellados, la salvación es un regalo para todo el mundo pero
no todo el mundo cree, el pueblo de Israel o las doce tribus no todos estaban
de acuerdo hasta el día de hoy, los 144 mil son del pueblo de Israel.
Congregación cristiana de restauración de fe Elohim.
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